Cómo Mantener y Cuidar un Charango de Ébano

El charango es un instrumento tradicional andino que ha ganado popularidad por su sonido vibrante y su versatilidad. Cuando está hecho de ébano, el charango no solo ofrece una calidad tonal superior, sino también una durabilidad excepcional. Sin embargo, para mantener estas cualidades a lo largo del tiempo, es crucial cuidar adecuadamente el instrumento. En esta guía, exploraremos cómo mantener y cuidar un charango de ébano para asegurar que continúe brindando un sonido impecable y una estética impresionante.

Limpieza Regular del Charango de Ébano

El primer paso para cuidar un charango de ébano es realizar una limpieza regular. El ébano es una madera densa y resistente, pero aún puede acumular polvo, aceites y suciedad con el uso.

• Limpieza de la Superficie: Utiliza un paño de microfibra suave y ligeramente húmedo para limpiar la superficie del charango después de cada uso. Evita el uso de limpiadores químicos que puedan dañar la madera.
• Cuidado del Diapasón: El diapasón del charango de ébano puede beneficiarse de un cuidado especial. Aplica una pequeña cantidad de aceite de limón o aceite específico para madera de ébano una o dos veces al año para mantenerlo hidratado y prevenir grietas.

Control de Humedad

El ébano, al igual que otras maderas, es sensible a los cambios de humedad. Mantener el charango en un ambiente con una humedad relativa controlada es crucial para evitar deformaciones o rajaduras.

• Humedad Ideal: Procura mantener la humedad entre el 45% y el 55%. Puedes utilizar un humidificador en la habitación donde guardas el charango, o un humidificador específico para instrumentos dentro de la funda.
• Evita Cambios Bruscos: No expongas el charango a cambios bruscos de temperatura o humedad. Si debes transportar el instrumento entre ambientes con diferentes climas, deja que el charango se aclimate dentro de su funda antes de sacarlo.

Almacenamiento Apropiado

El lugar donde almacenas tu charango de ébano también influye en su longevidad.

• Funda de Calidad: Guarda siempre tu charango en una funda rígida y acolchada cuando no lo estés utilizando. Esto lo protegerá de golpes, cambios de temperatura, y polvo.
• Posición de Almacenamiento: Almacena el charango en posición horizontal o vertical, pero nunca apoyado sobre el puente, ya que esto puede ejercer una presión innecesaria y dañar la estructura del instrumento.

Mantenimiento de las Cuerdas

Las cuerdas son una parte esencial del charango, y su mantenimiento adecuado es vital para la calidad del sonido.

• Cambio Regular de Cuerdas: Cambia las cuerdas regularmente, especialmente si tocas con frecuencia. Las cuerdas viejas pueden perder tensión y afectar la afinación y el sonido.
• Limpieza de las Cuerdas: Limpia las cuerdas después de cada uso con un paño seco para eliminar aceites y sudor que pueden corroerlas con el tiempo.

Protege al Charango de Ébano Contra Golpes

El ébano es resistente, pero un golpe fuerte puede causar daños irreparables.

• Evita Caídas: Manipula el charango con cuidado y evita dejarlo en lugares donde pueda caer o ser golpeado.
• Accesorios de Protección: Considera el uso de protectores adicionales, como pickguards, si tiendes a tocar de manera enérgica para evitar arañazos en la madera.

Transporta tu Charango de Ébano Seguro

Cuando necesites transportar el charango, hazlo de manera segura para evitar cualquier daño.

• Funda Protectora: Utiliza una funda de transporte con protección acolchada para amortiguar cualquier impacto.
• Precaución en Viajes: Si viajas en avión, siempre lleva el charango como equipaje de mano si es posible, para evitar daños en la bodega de carga.

Revisión Periódica

Llevar el charango a un luthier de confianza para revisiones periódicas es una buena práctica.

• Ajustes de Mantenimiento: Un luthier puede realizar ajustes en el puente, las clavijas y verificar la integridad de la estructura, asegurándose de que el charango esté siempre en óptimas condiciones.
• Reparaciones Menores: Si notas algún problema, como pequeñas grietas o pérdida de tono, consulta a un profesional antes de que el daño se agrave.

En La Casa del Bandolín, se fabrican charangos cuyo diapasón es de ébano, ofreciendo una superficie suave y resonante para tus dedos, lo que permite una ejecución precisa y cómoda en cada acorde y melodía. Además, la elección del guayacán verde para la caja del charango aporta una resonancia profunda y un tono cálido, creando un equilibrio perfecto entre potencia y delicadeza en cada nota.

Cuidar un charango de ébano no es solo una cuestión de mantener su apariencia, sino también de preservar su capacidad para producir un sonido hermoso y resonante. Con una limpieza regular, un almacenamiento adecuado, y un mantenimiento cuidadoso, puedes asegurarte de que tu charango permanezca en perfectas condiciones durante años. Así, este instrumento seguirá siendo una fuente de alegría musical y una pieza de valor cultural, fiel reflejo de la tradición andina.